vendredi 26 décembre 2008

Hoy no hay nadie en el café de Elvira, el frío es total.


No estamos al abrigo de la verdad.


Nada nos protege. Quiero decir

que no hay que contar

con el grito

ni la ausencia

ni con nadie que nos lea las cartas

y nos traduzca el contenido.


Aquí estamos solos

y no son las sombras que parecen acompañarnos

otra cosa que un fingir de labios

y de luces.

1 commentaire:

  1. Entré un momento, a tomarme un café. Me parece un lugar agradable, tranquilo.

    Estamos solos cuando nacimos, y mucho más cuando morimos.

    Pero siempre hay personas con las que contar.

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